La linda Plaza de Llolleo. Las zonas verdes dan relax y reducen estrés.
Han acompañado a las ciudades desde sus orígenes: jardines, parques, zonas verdes y el arbolado son vitales para mantener una buena calidad de vida en ciudades y favorecer el bienestar de sus habitantes.
Vivir en urbes con alto nivel de urbanización, rodeado de tráfico vehicular, ruido y mucho ajetreo, aumenta el riesgo de sufrir psicosis y depresión.
El contacto con enclaves naturales en la ciudad permite reflexionar, sentirnos libres, relajarnos y bajar estrés. Las áreas verdes son importantísimas para el bienestar físico y emocional. Funcionan como «áreas tranquilizantes» muy beneficiosas en zonas urbanas donde el estrés es un aspecto demasiado común de la vida diaria.
Los espacios verdes de las ciudades son auténticos pulmones. Forman pequeños oasis en medio del cemento y asfalto de la ciudad. Regulan temperatura y humedad, producen oxígeno, filtran radiación, absorben contaminantes, amortiguan ruidos y forman ecosistemas urbanos que ayudan a conservar biodiversidad. Son lugares de paseo, vida al aire libre, relax, ocio, mejora de cohesión social y conciencia ambiental.
Está claro que los actuales tiempos de escasez hídrica obligan a repensar y buscar alternativas para reducir el gasto de agua y tener áreas verdes sustentables ¡pero no es necesario perder el verde para lograr ese ahorro hídrico! Ciudades con políticas de paisajismo y jardinería responsable han ido poco a poco reemplazando especies de mucho riego y cuidados por otras nativas e introducidas, de menos riego y fácil mantención, pero sin perder el valor estético y funcional.
Vale agregar que áreas verdes bellas son elementos fundamentales para el turismo y desarrollo económico de una ciudad. Los destinos más solicitados tienen relación con espacios verdes. Los viajeros lo tienen claro: alejarse de lugares grises. El ser humano necesita contacto con plantas y naturaleza, es imprescindible reverdecer las ciudades.
Lugares como Santo Domingo han hecho de sus áreas verdes una seña de identidad. En fotografía: la bella Plaza de las Flores de la denominada “comuna parque”.
En 2024 San Antonio tiene 4,65 m2 de áreas verdes por habitante (fuente: Dirección de Medioambiente, Aseo y Ornato IMSA).
En Chile el estándar de área verde fijado por el CNDU Consejo Nacional de Desarrollo Urbano por persona es de 10 m2.
La ONU recomienda que las ciudades deben tener por lo menos 16 metros cuadrados por habitante.