Conocida como “Casa de las medallas” o “Casa de las monedas” sólo se puede ver desde fuera. Sin lugar a dudas una parada interesante en mitad de Avenida José Ángel Ortuzar, junto a un colegio.
Se trajo desde Suiza en 1880. Las medallas que adornan su frontis son los premios que el diseño de este inmueble de madera, prefabricado de 2 pisos, obtuvo en diversas exposiciones de Europa.
En 2005 la dueña María Antonieta Sagues contaba a Revista Datocosta que la casona había sido comprada por su madre a la familia García Huidobro a mediados del siglo XX y que se había realizado una considerable inversión para reparación y mantención. En ese momento Datocosta constató la belleza de la escalera caracol de fierro forjado del interior.
Hoy, la casona de casi 150 años sigue siendo una pieza histórica hermosa y monumental de nuestra ciudad. Un ícono de Cerro Placilla.
