Caleta de Pescadores Pacheco Altamirano de San Antonio

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El Sindicato de Pescadores Artesanales San Pedro de la playa de la Caleta de San Antonio había sido fundado con personalidad jurídica en julio de 1927. A pasos del mar, comenzó a tomar forma la Población Pescadores. Nació oficialmente en 1947. Se beneficiaron 25 familias de pescadores. Es un barrio pequeño entre calle Antonio Núñez de Fonseca, la playa de la caleta, el Mercado del Mar, el muelle de pescadores, la Gobernación Marítima y mall Arauco.

En 1940 el famoso escultor de Llolleo don Domingo García Huidobro (1899-1974) regaló al barrio una estatua de San Pedro, Patrono de los Pescadores. Se dice que debajo de ella está la primera piedra del inicio de construcción del puerto en 1912. El monumento, al igual que el Vía Crucis de Llolleo, era originalmente blanco. Años después, en una mala idea, se le coloreó.

En esa época frecuentaba la caleta el famoso diplomático y pintor internacional chileno Arturo Pacheco Altamirano (1905-1978) que vivía en Las Cruces. Allá fue declarado Hijo Ilustre de El Tabo.  Tema central de su trabajo artístico fueron escenas marinas y portuarias que hoy están en galerías de América, Europa y Asia. La caleta de San Antonio fue inmortalizada en varias de sus obras, aquí donó varios de sus cuadros. El 19 de mayo de 1965 la Municipalidad de San Antonio declaró a Pacheco Altamirano como Ciudadano Ilustre de San Antonio. Se le otorgó medalla municipal y se designó con su nombre a la caleta de pescadores de la bahía. El pintor también es Hijo Ilustre de otras ciudades como Santiago, Chillán, Santiago, San Fernando, San Felipe, Concepción, Punta Arenas y Puerto Montt.

En ese tiempo se gestaron aquí emprendimientos de gastronomía turística cuando los pobladores esperaban a los pescadores con sabrosos y contundentes platos al regreso de la pesca en alta mar. Se corrió la voz, dando paso así a la primera “picada” llamada El Ancla. A fines de la década de 1980 Luis Santander abrió el primer local de manera comercial llamado Restaurant La Caleta, de ahí en adelante la mayoría vio en ese tipo de negocio la oportunidad de tener una mejor estabilidad económica sin poner en riesgo su vida en el mar. La mayor parte de las casas se acondicionaron como restaurantes haciendo del barrio un sector gastronómico y turístico que atrae a locales y turistas por los variados platos que ofrecen cada uno de ellos y por el encanto de su privilegiada vista a la bahía y el puerto. Para quienes disfrutan de la gastronomía típica costera aquí hay restaurantes que son una muy buena opción. Además, se puede ver pelícanos y lobos marinos. Sin duda, un punto de interés.

Fecha destacada del barrio: 29 de junio de cada año como Día Nacional de la Pesca Artesanal

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