La leyenda de los Ojos de Mar

Al sur de Barrancas, entre el puerto, el Parque DYR y el estero El Sauce florece el Humedal Laguna Ojos de Mar de Llolleo. El bello entorno se formó cuando se realizaron obras para regular la desembocadura del río Maipo en 1939 e inicios de la década de 1940.
La rica mitología de San Antonio tiene su propia versión acerca del origen del lugar. Llolleo viene de la palabra Llollehue, que significa “donde se pesca con redes”. Desde épocas ancestrales los pobladores locales se han dedicado a la pesca, en la boca del río Maipo y en la playa de Llolleo.
Una versión de la tradición popular cuenta que hace un siglo hubo un tiempo de escasez de pesca donde el hambre amenazó a muchas familias de pescadores. Un día, los hombres de mar atraparon en sus redes una albacora. El esfuerzo para capturarla fue impresionante pues la fuerza de la criatura casi hunde a los botes pesqueros. Por fin llegaron a la costa con el animal, antes de cocinarlo ocurrió algo extraño, los presentes sintieron que el animal los observaba con suma tristeza. El hambre fue mayor, el pescado fue faenado y cocinado. Al día siguiente del festín, la gente vio sorprendida como de los restos de la albacora, específicamente de los ojos que habían sido arrojados a la playa, emanaban abundantes lágrimas. Se dieron cuenta entonces que en realidad habían capturado una sirena. Esos mágicos ojos arrancados y arrojados a la arena lloraron toda la noche. De esas lágrimas nacieron las actuales lagunas conocidas como Ojos de Mar.